7 de septiembre de 2009

La codicia ha envenenado el alma del hombre



Les dejo la escena final de la película "El Gran Dictador", donde Charles Chaplin da un discurso en favor de la libertad y de la paz, criticando a un sistema alimentado por la gente, donde la sumisión ya es algo común y la esclavitud se ve como algo natural y, hasta en cierto punto, necesaria. Cuando pensamos en los "grandes dictadores", la historia (y la escuela) nos lleva a pensar en Hitler, Stalin, Mussolini o Franco, pero creo que ya es hora de empezar a darnos cuenta que los dictadores están en todos lados, al mando de los gobiernos y tomando todas las decisiones. Nadie tiene la verdadera intención de ayudar o cambiar las cosas. Es hora de darnos cuenta quienes son los que alimentan ese poder, y por consiguiente, asumir la responsabilidad. Realmente valdría la pena.
Espero que les sirva!

"No se sometan a las bestias,
hombres que los desprecian y esclavizan,
y les dicen que hacer, que pensar, que sentir.
(...) rechazo a todo lo que es natural."

"Más que maquinaria, necesitamos humanidad."

2 comentarios:

luciana dijo...

...asumir la responsabilidad..se ser-actuar y pensar por uno mismo...sentir por sobre todas las cosas..ese impulso interior tan particular a la frecuencia dinamica de cada ser...sensibilidad organika...un reconocimiento al amor propio que llevamos todos dentro...y que sea el compartir...desde lo fragmentario de cada eleccion de vida hacia la totalidad que comprende lo absoluto que percibimos como tierra-madre...universo-estelar...
Gracias por mantener el espiritu activo...hasta pronto

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.